Subió el Volcán tras Superar Tetraplejia

Hace unos días, un grupo de 8 entusiastas montañistas osorninos ascendieron hasta la cumbre del volcán Osorno, que tiene una altura de 2.652 metros sobre el nivel del mar.

Así, comenzaron por el sector La Picada hasta Paso Desolación y tras, dormir en el refugio, iniciaron un ascenso de cuatro horas por el sendero de gravilla y rocas, hasta fijar su campamento base a los 2.000 metros. Al tercer día, a las cuatro de la mañana y con las estrellas como compañeras, iniciaron la fase dos a la cumbre, logrando alcanzar la cima luego de tres horas y media de marcha, entre espectaculares glaciares y grietas.

Lo más increíble de esta historia no fue cumplir con llegar a la cumbre, sino la lucha por ganarle a la adversidad que logró uno de los integrantes de este ascenso, quien hace siete meses atrás se encontraba tetrapléjico e internado en el Servicio de Neurología del Hospital Carlos Van Buren en Valparaíso.

SUPERACIÓN

Hasta abril de 2010, el osornino Alexandro Cea (21 años), estudiante de derecho de la Universidad Católica de Valparaíso y deportista amante del deporte al aire libre, realizaba su vida absolutamente normal, pero de a poco comenzó a sentir pérdida de sensibilidad y  fuerza en todo su cuerpo.

Cuando le realizaron los exámenes médicos, los especialistas confirmaron que Cea padecía una extraña variante del Síndrome de Guillain Barré conocida por su sigla en inglés “CIDP”, trastorno neurológico en que el sistema inmunitario del cuerpo ataca el sistema nervioso, lo que finalmente terminó dejándolo tetrapléjico y al borde de la muerte.

«La enfermedad fue progresiva, de a poco fui perdiendo la movilidad del cuerpo hasta quedar postrado sin poder mover absolutamente nada, aunque siempre me mantuve  consciente. El apoyo de mi familia, de los médicos, pero también las ganas de salir adelante hicieron que me recuperara en forma bastante satisfactoria. Me falta quizás recuperar algo de fuerza y masa muscular en algunas zonas, pero estoy prácticamente recuperado», dijo.

La recuperación fue ardua, ya que estuvo durante largos meses con trabajo físico y kinésico en Valparaíso y Osorno hasta su recuperación.

Realizar la expedición en el Osorno era todo un desafío para él, ya que antes de emprender esta excursión y apenas estuvo en condiciones de soportar su propio peso, había ya fracasado en un intento por lograr la cumbre del volcán Calbuco.

«En un momento los médicos me dijeron que quedaría con secuelas y que abandonara la esperanza; pero que siempre podría contar con la Teletón. Afortunadamente resultó todo lo contrario. Subir a la cumbre del volcán Osorno fue una gran proeza y símbolo de mi total recuperación. Espero poder hacerlo trascender”, apuntó Alexandro.

 

 *Fuente: Diario Austral de Osorno